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¡Camarero, Liga para dos! Los repartos televisivos

Imagen de diariosdefutbol.com

Puede ser que no se considere especialmente popular este artículo, debido a los muchos seguidores que tienen los dos equipos más grandes de España, FC Barcelona y Real Madrid, pero no podemos, ante el inminente comienzo de la temporada, quedarnos sin dar una opinión objetiva sobre la Liga BBVA y más concretamente sobre como los derechos televisivos afectan económicamente y perjudican al fútbol español.

Y digo que perjudican al fútbol español, porque a pesar de que a algunos medios de comunicación no les convenga, al fin y al cabo ahora saben lo que vende y lo tienen realmente fácil, y aunque un cada vez más pequeño número de los aficionados al fútbol no lo quieran ver, la desigualdad de la liga española y sobre todo, la diferencia económica entre los clubes, la convierten ya no solo en previsible, sino en aburrida, salvo para madridistas y culés que no ven más allá de los colores de su equipo. Y lo más importante, afecta negativamente en el fútbol español en muchos aspectos.

Es obvio que FC Barcelona y Real Madrid son los clubes más grandes y más poderosos económicamente de España. Esto es así por historia, por número de aficionados, por ingresos de publicidad, por ingresos, televisivos, etc. Incluso con otro reparto en los derechos televisivos, Barcelona y Real Madrid seguirán siendo los clubes más importantes por esto y muchas otras cosas y sin duda seguirían repartiéndose muy a menudo, títulos y ligas.

No obstante, las cosas no pueden seguir como hasta ahora. Reciben estos dos equipos, cada año, 140 millones de euros de televisión. Más del triple de lo que reciben los demás equipos que no alcanzan ni los 45 millones de euros.
La cifra para los demás en lo que a ingresos se refiere, no son del todo malas, pero quedan inhabilitadas por la diferencia con respecto a los dos colosos. Y eso que la diferencia la comparamos con equipos como Atlético de Madrid o Valencia CF que están en el siguiente escalón de riqueza. No hablemos del resto porque más de la mitad de la liga, más de diez equipos, no alcanzan ni los 15 millones por ingresos de publicidad.

 

En esta gráfica perteneciente a la temporada pasada, podemos ver estos datos en algunas ligas europeas. Vemos como en Inglaterra, competición en la que también se reparte más dinero de televisión, hay mucha menos diferencia, haciendo la liga más igualada. El último clasificado en la Premier League cobra más que un tercer o cuarto clasificado en España.
Como vemos las demás ligas, independientemente del dinero empleado en el reparto, guarda siempre menos diferencias que la española entre primeros y colistas.

Algunos defienden el reparto español diciendo que la gente ve más por televisión al Real Madrid y al Barcelona y por eso deben cobrar más en función de su audiencia. Estamos de acuerdo, pero ¿cuanto más? ¿tres veces más que el tercero y el cuarto? ¿Mucho más del doble de los primeros clasificados en otras ligas? ¿Una docena de veces la cantidad que reciben otros diez equipos de la Liga BBVA? ¿Eso beneficia una competición o la devalúa?

Quizás esa diferencia tan grande y desproporcionada no debería existir. Y explicaré por qué. La Liga BBVA es previsible y aburrida salvo que te cieguen los colores blanco o blaugrana. El año pasado ya se dijo que la Liga volvería a ser cosa de dos vista la diferencia en la 2010/2011. Al poco de empezar, una derrota por sorpresa y un empate llevó a Pep Guardiola y la cúpula madridista a hacer ver que la liga no estaba tan decidida.

Nueve meses después con esa sospecha embrionaria ya gestada, se vuelve a ver lo mismo una vez más, con dos equipos a treinta puntos de los demás, jugando una liga a parte en la que nada pintan los demás, con un «meritorio» récord de puntos en la historia del torneo, lo que más que reflejar al mejor equipo de la historia, refleja fielmente la desigualdad existente. No digo que todo resulte aburrido, es apasionante ver a los demás en la lucha por los puestos de Champions y Europa League, las sorpresas protagonizadas por Levante y Osasuna en lo alto de la clasificación y la reñida lucha por la permanencia con la imponente remontada del Real Zaragoza esta temporada pasada, por ejemplo. Pero la lucha por el título, solo gusta a los aficionados de los dos de siempre, porque desde principio de año saben que salvo catástrofe, son los que lo van a pelear.
Lejos quedaron los tiempos en los que el Deportivo de la Coruña se hacía un hueco entre los grandes, o el Valencia CF conquistando el título de Liga. O cuando una sorprendente Real Sociedad le disputó el título de liga al Real Madrid hasta bien avanzada la competición.

Pero ya no es solo la calidad del campeonato, el no tener alternativas para disputar el título como sí ocurre en el resto de ligas europeas, ni la gran diferencia con el resto, como si solo existiesen dos equipos en la liga. Imaginad por un momento, un reparto más equitativo de los derechos de televisión. Es obvio que FC Barcelona y Real Madrid no querrían, pues todo lo que suponga ingresos y títulos es lo que ellos desean, es lógico cuando miran únicamente por su beneficio, pero imaginémoslo aunque sea una utopía momentánea.

La Liga BBVA reñida hasta el final, con cuatro o hasta cinco equipos peleando por hacerse con el título de liga, jugándoselo todo hasta el final. Una liga en la que, aunque habría diferencia porque los dos más grandes, siempre lo serán, no hubiese tanta distancia a la hora de confeccionar una plantilla. Donde los más pequeños también podrían reforzarse y mantener a sus estrellas, pues podrían pagar también más salarios con ese ingreso anual fijo.

Una liga igualada, con sorpresas, donde 18 equipos no saldrían a verlas venir y rezando para no salir goleados cuando jugasen contra los más grandes. Tal vez, veríamos fútbol de verdad, porque el deporte es competición.

FC Barcelona y Real Madrid seguirían siendo los más grandes, seguirían haciendo fichajes estelares, para eso tienen más ingresos en todos los ámbitos, pero igual también el fútbol español se vería beneficiado. Quizás sin tanto dinero que gastar, el lateral derecho del Real Madrid sería Carvajal (en lugar de emigrar al B. Leverkusen), y puede que hombres como Joselu (ahora en el Hoffenheim), Lucas, Jesé, Nacho o Dennis tuviesen más oportunidades en la primera plantilla, siendo futuro del fútbol español.

Sería una liga más bonita y divertida para la gran mayoría de la geografía española pero claro, ante el dinero poco se puede hacer y la fuerza debe venir desde arriba, desde la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) o la Liga de Fútbol Profesional (LFP) que pretendan una liga más reñida, más bonita y menos previsible. Y en definitiva, más igualada.

Y para concluir, solo una mención para los que aún terminando de leer este artículo creen que FC Barcelona y Real Madrid deben seguir igual, recibiendo lo mismo. Solo recordarles que estos equipos siempre ganarán más, porque tienen más ingresos en merchandising, en abonos, en derechos televisivos, en publicidad, pero algo más de vida a los demás reforzaría la competición, cambiaría la «ruina actual» por la competitividad.
Haceos una idea de un club que cobra 12 millones de euros de televisión, teniendo veinticinco jugadores , con suerte podría destinar una ficha de 480.000 euros por futbolista. Hay que sumarle abonos o publicidad, que podría incrementar la cifra, pero haced cuentas… en los otros dos clubes hay futbolistas que cobran 6, 9 o 10 millones por temporada. La posibilidad de crecer para el pequeño es irrisoria y hablar de luchar por el título solo provoca carcajadas cuando no debería.

El fútbol español necesita una remodelación que refuerce la liga. Mientras llega o no, habrá que conformarse con ver partidos en los que se reconozca el fútbol y evitar otros en los que los grandes pasan como aviones goleando a todo aquel que se pone en su camino, por siete a cero, ocho a uno y demás estrambóticos resultados con los que los aficionados de estos clubes gozan entre risas y guasa, y con los que las ilusiones de los más pequeños se rompen en pedazos una y otra vez. Si goleas al menos hazlo con uno cercano a tu nivel, no pongas pesos pesados a pelear contra niños.

Poca solución tiene esto visto los altos estamentos de nuestro fútbol, pero al menos un servidor, deja grabado en la red de redes y Futbolandia, algo que la gran mayoría piensa y que pocos dicen para no recibir justificaciones de que todo debe seguir igual o que la prensa afín a estos equipos te tache de «rebelde», en lugar de «justo». Solo recuerdo, que un aficionado de un equipo pequeño, tiene las mismas esperanzas, ilusiones o sueños que los miles que siguen a los más grandes. Hagámoslos competir en igualdad y una vez sobre el verde del césped, que gane el mejor. Los títulos se los seguirán repartiendo los de siempre por potencia, pero la esperanza y la diversión encontrarían un nuevo camino.

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3 comentarios

  1. Gran articulo compañero. De un cule. Te pones en el punto de vista de todos y das tu opinión. La cosa de los aficionados es que cuesta mucho bajar el nivel de vida que Tienes perjudicandote a ti mismo y ahora mismo culers y merengues estamos en unas nubes con el nivel de nuestros equipos…

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