Entrevista José Manuel Pesudo 1972
En febrero de 1972 el Betis fichó a José Manuel Pesudo para reforzar la porteria bética. Se trataba de todo un veterano jugador que había defendid, entre otros, la portería del Valencia y del Barcelona. Llevaba retirado del fútbol desde junio de 1971, y con su fichaje se buscaba por parte de Ferenc Szusza la experiencia y veteranía necesarias para el marco bético, pues los dos porteros de la plantilla, Campos y Trigueros, eran muy jóvenes.
Al día siguiente a su fichaje el periodista Martín Benito le realizaba esta entrevista en la páginas de Marca.
El fichaje de Pesudo por el Betis ha causado cierta sorpresa entre los aficionados, pese a que constantemente se hablaba de la necesidad que tenía el equipo de reforzarse con un portero veterano, ya que los dos que figuran en la plantilla carecen de la experiencia necesaria para afrontar el difícil compromiso de la permanencia.
Pesudo llegó ayer por la tarde, y por la noche quedó formalizado su contrato con el Betis. Esta mañana ha entrenado bajo las órdenes de Szusza. La primera pregunta fue referente a la edad.
- Los años, contesta el nuevo portero bético, se demuestran el campo. Tengo treinta y tres
- ¿Muchos o pocos para el fútbol?
- Yo creo que la mejor edad de un portero transcurre desde los veintisiete a los treinta y cinco. Es el puesto más ingrato del equipo, porque no se permiten fallos, y el más lucido si las cosas salen bien. Si todos los jugadores necesitan saber estar en el terreno de juego, en un portero es algo más importante, porque, además, hay que tener los nervios tranquilos, lo que solo se consigue después de bastante tiempo.
El Betis tiene una vieja tradición de jugadores veteranos que han cuajado magníficas temporadas en sus filas, cuando ya prácticamente se los había dado como acabados para el fútbol: Sobrado, Barinaga, Seguer, Bosch, y no digamos Pepín, que a los treinta y tres años consiguió la internacionalidad con Villalonga, actuando lucidamente en un partido comprometido para España en Dublín, frente a Irlanda, clasificatorio para el Campeonato del Mundo. Tal vez esa tradición ha animado a los actuales directivos a contratar a Pesudo.
- ¿En qué situación se encontraba actualmente?
- En la de obrero parado, prácticamente retirado. Atendía a los negocios familiares en el pueblo.
A Pesudo se le ha contratado hasta final de temporada, contrato prorrogable si ambas partes están de acuerdo.
- ¿Cuánto tiempo sin jugar?
- Terminé mi contrato con el Valencia el pasado año, el 30 de junio. Llevo sin jugar en competición oficial aproximadamente un año.
- ¿No cree que puede tardar mucho en recuperar su forma?
- En absoluto, porque he seguido entrenando con continuidad
- ¿Pensaba entonces en la vuelta al fútbol activo?
- No es que lo pensase, pero como me gusta el deporte, me entrenaba. Unas veces jugaba al tenis y otras me ejercitaba con el equipo del pueblo. Prueba de que me encuentro bien físicamente, es que cuando jugaba tenían un peso de 80 kilos y ahora solo de 81.
- ¿Dispuesto a jugar en Bilbao?
- Si fuera necesario lo haría, pero creo que necesitaré por lo menos ocho o diez días para coger ritmo y acostumbrarme a la fama de jugar de mis nuevos compañeros
- ¿Qué le ha hecho volver?
- Me ha ocurrido como a los toreros que se cortan la coleta una temporada, y la siguiente están otra vez en los ruedos porque llevan dentro el gusanillo de la afición
- ¿Había tenido alguna propuesta más?
- De equipos de Segunda División sí. Pero eso no me atraía para mantener mi actividad en campos de menor categoría. Ahora, la propuesta del Betis me ha animado y ha reavivado la enorme afición al fútbol, y como es un conjunto de Primera División, ha decidido mi vuelta a la actividad.
- ¿Qué significa esta vuelta a la actividad?
- Caería en el tópico si dijese que me encuentro en mi mejor momento y con la misma ilusión que cuando empezaba.
No se podía eludir la cuestión de aquella famosa lesión que le impidió fichar por el Madrid. Pesudo pasó ayer los reconocimientos médicos correspondientes con total éxito.
- ¿Qué hay sobre su célebre lesión?
- En un partido contra el Real Madrid sufrí un golpe al chocar Amancio, Gento y yo. Me sacaron una radiografía del hombro izquierdo porque me dolía. Nos la llevamos a Valencia y se examinó, pero seguí jugando porque no se trataba de nada particular. Al parecer es un defecto congénito. Tengo una clavícula más corta que otra y, de no haber sido por aquel choque, seguramente me hubiera muerto sin saberlo. Este defecto no me ha impedido nunca jugar al fútbol con el rendimiento que lo he hecho. Después vino lo del fichaje por el Madrid. Me cogieron como solución de emergencia. Llegué a Madrid, entrené con Muñoz y firmé la lista de concentración, pero antes de salir hacia ella me hicieron una serie de radiografías de los pies a la cabeza. Me dijeron que seguiríamos el lunes, pero entonces yo cogí el billete y me volví a Valencia. Sufrí, ciertamente, un golpe fuerte en mi moral.
Está de más repetir el historial de José Manuel Pesudo Soler, nacido en Almazora, provincia de Castellón. Sus equipos más importantes han sido el Valencia, tres temporadas; Barcelona, cinco y nuevamente en el Valencia otras cinco. Desde anoche es nuevo portero del Betis.
Fuente: Martín Benito en Marca 11 de febrero de 1972