El doblete de Gamba Osaka, buscando dominar el fútbol japonés
Hablamos en el título de dominar el fútbol japonés aprovechando que Gamba Osaka se ha proclamado campeón de la J-League y la Copa Emperador, aunque siendo sinceros, es poco probable que ocurra toda vez que la liga japonesa es una de las competiciones más igualadas que existen en la actualidad hablando de fútbol.
De hecho, la escuadra japonesa ha obtenido el título de liga empatando la última jornada ante el colista y consiguiendo un punto que a la postre ha servido para levantar el trofeo. A ese mismo punto de diferencia quedó Urawa Red Diamonds y a solo tres Kashima Antlers, Kashiwa Reysol y Sagan Tosu, lo que demuestra lo igualado de la competición.
En esta ocasión Gamba Osaka ha sido el equipo más regular, un equipo que empezó algo flojo (no pareció funcionarle el 4-2-3-1 con el que comenzó la temporada) pero que con el paso del tiempo alcanzó un estado de forma envidiable, goleando en muchas ocasiones y marcando con relativa facilidad (coincidiendo con el cambio al 4-4-2 tanto con doble pivote como en rombo), entrando en una dinámica con la que consiguió desbancar a los favoritos, entre los que destacaba Urawa Red Diamonds. Un equipo dirigido por Kenta Hasegawa del que os contamos todas las claves y sus jugadores más importantes.
En la portería se ha mostrado intocable Masaaki Higashiguchi, cuyos principal valuarte ha sido una defensa de cuatro que ha obtenido una gran regularidad. Aunque el joven Sub’21 Nishino y sobre todo Fujiharu han tenido presencia en la consecución del campeonato, los fijos atrás del equipo de Osaka han sido Daiki Niwa y Keisuke Iwashita como pareja de centrales habitual. En el lateral izquierdo su inquilino habitual ha sido el coreano Jae-Suk Oh mientras que el lateral derecho ha sido, mientras ha estado disponible, para Koki Yonekura.
En el centro del campo, en ese doble pivote tan habitual en la segunda fase de la temporada, Hasegawa ha optado por un doble pivote lleno de experiencia y veteranía. Dos directores de orquesta mundialistas con Japón en el pasado Mundial de Brasil’2014 como son Yasuyuki Konno y Yasuhito Endo. Dos jugadores que se equilibran mutuamente aportando solidez el primero y creatividad e imaginación el segundo.
En las bandas dos buenos llegadores, que tienden a buscar portería como Hiroyuki Abe, a la postre tercer máximo goleador del equipo y el joven Kotaro Omori, aunque en muchas ocasiones ha sido de la partida Kurata. También en ellos han tenido buenas cifras goleadoras, sobrepasando los cinco goles partiendo desde banda gracias al potencial ofensivo del Gamba Osaka. No obstante, la verdadera diferencia con el resto la han impartido sus delanteros, entre los que destacan Takashi Usami y el brasileño Patrick. Y eso que sus cifras no han sido especialmente destacadas y ni siquiera aparecen en los puestos altos de la tabla de realizadores, pero su papel asistiendo y formando parte de un engranaje donde todos han tenido un importante protagonismo como anotadores, ha sido esencial.
Patrick en un papel más finalizador (aunque Usami ha marcado un gol más en liga), más bregador, de pelea, cuerpo a cuerpo y aprovechando su buen cabeceo. Usami con más libertad, jugando por detrás del punta y consiguiendo disez goles y diez asistencias. El joven futbolista japonés ha vuelto a reencontrarse con su fútbol después de su breve periplo por la Bundesliga en Bayern de Münich y Hoffenheim.
Campeones de Liga y de la Copa Emperador, el próximo reto será la Supercopa. ¿Serán capaces de sumar otro título?
